• Entre el 1 de enero y el 30 de abril de 2025, la conversación digital sobre Mi Casa Ya se tornó marcadamente negativa, con términos como “Gran Estafa”, “Falta de Respuestas” y “Falta de Pago” liderando cientos de menciones en redes y medios digitales.

  • Más de 74.000 búsquedas mensuales evidencian la preocupación ciudadana por el paso a paso del programa, la continuidad de los subsidios y la reducción de cupos para 2025.

COLOMBIA (Mayo 06 de 2025).        El programa Mi Casa Ya, bandera del acceso a vivienda en Colombia, enfrenta su mayor crisis de credibilidad y transparencia. Un análisis de la conversación digital realizado con Meltwater y Answer the Public entre enero y abril de este año revela que las expresiones “Gran Estafa”, “Falta de Respuestas”, “Política de Vivienda” y “Falta de Pago” son las más repetidas por los ciudadanos, reflejando una percepción de crisis y desinformación.

En esta conversación destacan asociaciones directas al Ministerio de Vivienda, a Gustavo Petro, a ciudades como Medellín y Bogotá, así como a otros actores como el Icetex, Ser Pilo Paga,  Benedetti o Iván Duque.

A la par, datos de búsqueda en Answer the Public muestran más de 74.000 búsquedas de información sobre cómo acceder paso a paso al subsidio, cuándo inicia el programa, la recurrencia de los beneficios y cómo varía la elegibilidad según el estatus de la persona (desplazado, joven, víctima, colombiano en el exterior, pensionado, entre otros).

Las preguntas sobre la sostenibilidad del programa (“Mi Casa Ya se quedó sin plata”, “Mi Casa Ya para el 2025”) y la comparación con cajas de compensación y préstamos digitales son tendencia, especialmente en regiones como Manizales, Montería y Mosquera.

El trasfondo de este escenario de inquietud está asociado a decisiones recientes del Gobierno. El Ministerio de Vivienda, que prometió 50.000 subsidios anuales y una meta de 200.000 entre 2022 y 2026, reportó en 2023 la entrega de 52.211 subsidios (37,6% de la meta). Sin embargo, en 2024 cambió la metodología, sumando los subsidios de las Cajas de Compensación Familiar y reportando un avance del 97,4% frente a la meta del Plan Nacional de Desarrollo.

Camacol y expertos del sector han cuestionado esta contabilidad, señalando que el avance real, si se cuentan solo los subsidios estatales de Fonvivienda, estaría sobre el 50%.

La situación se hizo crítica tras la Circular 012 del 16 de diciembre de 2024, que suspendió los subsidios a la tasa de interés y cerró la plataforma para nuevas postulaciones. Para 2025, solo hay recursos para 20.500 subsidios a la cuota inicial (de los 50.000 prometidos), de los cuales 10.000 ya estaban preasignados, dejando apenas 10.500 cupos disponibles para todo el año. Esto afecta directamente a 44.422 hogares en estado “Interesado-Cumple”, que ven truncadas sus expectativas, y a 40.500 hogares de estratos 2 y 3 que perderán la cobertura a la tasa, enfrentando incrementos de hasta un 30% en sus cuotas hipotecarias. El sector de la construcción prevé la pérdida de 200.000 empleos en 2025.

Al respecto, recientemente la concejal de Bogotá, Sandra Forero Ramírez, expresó una fuerte preocupación por los cambios recientes del programa. Según sentenció Forero, “esta focalización no será ejecutable. “Es otro engaño, otra expectativa sin futuro para los colombianos”.

Lo cierto es que la conversación pública y digital sobre Mi Casa Ya está marcada por la desconfianza, la falta de respuestas y la incertidumbre, en un efecto que se estima golpeará en diferentes direcciones no solo familias, sino también empresarios y gobernaciones que no saben cómo apostar por la continuidad de este programa y cómo garantizar el cumplimiento de recursos en tanto los siguientes pasos del mismo no están avanzando como se tenía estimado.

Fuente: Central de Noticias AndeanWire

Source: Aw News Center (Colombia)